martes, 6 de noviembre de 2018

235. Practica las Obras de la Misericordia en tu vida diaria.

Empezamos con un fragmento de la película “ CADENA DE FAVORES”, donde la voluntad de un niño por mejorar el mundo utilizando la solidaridad y las relaciones humanas, hará cambiar a todos; en un mundo donde la falta de ideales, el egoísmo o el individualismo prevalecen por encima de otros sentimientos.
Tradicionalmente, la religión cristiana ha enseñado la necesidad de, imitando la misericordia de Dios, llevar a cabo esta actitud en forma de obras, tanto espirituales como corporales.
¿Qué quiere decir la palabra misericordia?
La palabra misericordia viene del latín y  se refiere a sentir por  la desdicha, el sufrimiento o la necesidad del otro. Implica tener un corazón solidario con aquellos que tienen necesidad.
“Tener un corazón misericordioso no significa tener un corazón débil. Quien desea ser misericordioso necesita un corazón fuerte, firme y  abierto a Dios”. Papa Francisco.
Redescubramos en clase y en nuestro entorno las obras de misericordia corporales: dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento, vestir al desnudo, acoger al forastero, asistir a los enfermos, visitar a los presos, enterrar a los muertos.
 Y no olvidemos las obras de misericordia espirituales: dar consejo al que lo necesita, enseñar al que no sabe, corregir al que se equivoca, consolar al triste, perdonar las ofensas, soportar con paciencia las personas molestas, rogar a Dios por los vivos y por los difuntos.
VÍDEO EXPLICATIVO